viernes, 26 de septiembre de 2014

Supersticiones

Cuando estaba embarazada de Gerard tenía mil supersticiones, como ya conté: si saco las llaves antes de que el ascensor llegue a mi piso, si consigo que esta canción termine justo cuando se abra la puerta del garage, si consigo pelar la naranja/manzana de una sola tira, si consigo... Me sentía tonta, pero era casi imposible evitarlo. Una persona muy sabia me dijo entonces que, como había algo importante "cocinándose" dentro de mí que no podía controlar, intentaba hacerlo por medio de pequeñas cosas absurdas sobre las que sí tenía algún control.

Así que hoy no me he reprimido, cuando todas las supersticiones me han cogido por el cuello, y me he dejado manejar por ellas. Todo fue tan bien el día de la implantación que... Mismos pantalones, camisa, zapatos.. incluso ropa interior. He seguido los mismos itinerarios de ida y vuelta. Incluso he llevado el mismo libro para la espera, aunque ya hace unos días que lo dejaba en casa.

No ha servido de nada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario